Dream AlcaláNoticiasNoticias Universidad de AlcaláUn investigador de la UAH descubre una nueva seta venenosa y mortal

Un investigador de la UAH descubre una nueva seta venenosa y mortal

El catedrático y experto en hongos de la Universidad de Alcalá, Gabriel Moreno, junto a otros investigadores franceses y de la Universidad de Sevilla, entre otros, han descubierto una seta venenosa y mortal de la familia de la Amanita phalloides a la que han llamado Amanita vidua.

La pista para descubrir una nueva seta también venenosa del género Amanita fue por la estacionalidad de las intoxicaciones. Amanita phalloides es bien conocida por ser una de las que más muertes causan a los humanos, y fructifica principalmente, en bosques de encinas, alcornoques, robles y pinos en otoño. Por desgracia, todos los años se producen intoxicaciones con esta seta, y si la persona no recibe urgentemente tratamiento hospitalario, fallece, incluso también aun siendo atendida, ya que puede necesitar de un trasplante hepático. Pero desde hace años se estaban produciendo una serie de intoxicaciones con setas blancas en primavera. 

Ya estaba descrita una especie venenosa parecida denominada Amanita verna, que significa ‘amanita de primavera’, pero no estaba claro si realmente se trataba de esta especie u otra parecida, por lo que empezamos a hacer indagaciones que nos han llevado diez años de trabajo colaborativo entre distintos institutos de investigación. ‘Así, describimos una nueva seta tóxica, hasta el momento no descrita. 

Es muy parecida al ‘gurumelo’ o Amanita ponderosa, un hongo muy apreciado en el oeste de Andalucía, especialmente en Huelva y sur de Extremadura (Badajoz) y en Portugal (Ribatejo y Alentejo), lo que daba lugar a confusión e intoxicaciones descritas por los médicos locales’, explica el profesor.

Gracias a diferentes técnicas, se ha podido comparar esta nueva especie con Amanita phalloides y A. verna, siendo tan tóxica como las anteriores. Gracias a las técnicas moleculares, llegaron a la conclusión de que en primavera coexisten dos especies muy parecidas morfológicamente, una de ellas era la conocida Amanita verna y la otra la novedosa Amanita vidua, que significa viuda.

A ambas les gusta el clima Mediterráneo y habitan en encinares y alcornocales de la Península Ibérica. ‘Además, comprobamos que la nueva especie contiene principios activos alfa y beta amanitinas exactamente iguales que la Amanita phalloides de otoño. Estos principios atacan al hígado, y la persona que las come sufre un síndrome de incubación tardía apareciendo los primeros síntomas a las seis u ocho horas de la ingestión, con fuertes vómitos y dolores que posteriormente provocan un fallo hepático’ explica el profesor Moreno.

La única forma de diferenciar las setas venenosas es ‘asistiendo a conferencias, perteneciendo a sociedades micológicas y consultando a especialistas, ya que cualquier seta comestible tiene diferentes parientes tóxicos que se le parecen. Por eso la gente equivoca unas con otras. La experiencia aporta la sabiduría de recoger la seta para que se vea bien la volva, hay que desenterrarla por completo y aplicar reacciones como con potasa. Pero mi recomendación es no consumirlas cuando se desconocen’ aconseja el experto.